domingo, 21 de marzo de 2010

Cuando te veo hacia arriba...


Cuando te veo hacia arriba, la luz me ilumina
Y tu grata sonrisa, me alborota y alborota alegría.
Pensando en ti estaba, cuando surgió la duda,
Serias mía algún día o solo para mi vista intrigada.

No cedo en mi anhelo, aunque no muestro mi desvelo
De la ternura de tu mano, y dedos sin igual.
La porcelana es nada, cuando la tienes a tu lado
Y la ingravidez me tortura solo pensarte a mi costado.

Las olas te vieron descansar tu cuerpo delgado,
Y el sol se maravillo iluminando menos que tu.
Viste hacia el horizonte y no te imaginaste,
Que estaba tu futuro tan cercano al lado.

Cuando te veo hacia arriba, tus ojos encarnan
La dicha de la vida y la luz de la perfecta amada.
La dicha, ¡si la dicha! de tu corazonada y anclada
En el mar profundo de mis marejadas encerradas.

La vida es linda creando a la perfecta amada
Coronada en belleza y dulzura destilada.
La luna desgasta tu piel tersa y agitada,
Y la bronceada habla que estuviste ilusionada.

Miel quiero darte y el paladar agradarte,
Iluminando tu mente en cien horas en adelante.
Las nubes te ofrecieron estar como el sombrero
Para cuidar tu belleza y que ames sin suspenso.

La gracia es extrema de tu rostro creado a perfección,
Hace que yo, el arquitecto de tus sueños, toque tu portón.
Me da gusto conocerte, quiero alegrarte un montón
E iluminando tu corazón para siempre, me impresiono.

Las flechas en el firmamento se dirigen a mi corazón
Porque tu dudas de lo que yo afirmo hoy.
La esperanza para mi es, como tu belleza tan real,
Y viendo tu vida no evito ver hacia arriba tu belleza sin igual.

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